La inseguridad

Lorena Castañeda. La inseguridad

¿Te sientes inseguro/a a la hora de tomar decisiones? ¿Dudas de tu capacidad? ¿Sueles necesitar para casi todo el apoyo y/o aprobación de otras personas? Me gustaría ayudarte

¿Te sientes inseguro en tu vida diaria?

La inseguridad en uno o varios ámbitos de la propia vida puede hacer que la persona se limite a sí misma en ámbitos importantes. A la larga puede surgir una intensa frustración, se reconoce a sí mismo/a como responsable de no haber intentado alcanzar ciertas metas o de dejarse llevar por sus miedos. Las inseguridades tienen como base una emoción básica: el miedo. Se pueden ver afectados diversos ámbitos importantes para el desarrollo personal como por ejemplo: las relaciones sociales, familiares y de pareja, el trabajo, los estudios y la consecución de metas. De entre los ejemplos anteriores, la inseguridad en el trabajo y la inseguridad emocional en la pareja son las que sufren con mayor frecuencia los pacientes que acuden a mi consulta.

Tipos de inseguridades

La inseguridad en uno mismo puede afectar a uno o varios aspectos de la persona. Pero, por suerte, siempre suele haber algún ámbito en el que la persona se siente más segura.

Algunos de los aspectos concretos en los que puede haber inseguridades:

  1. Inseguridad en cuanto a la capacidad de logro. La persona se siente incapaz de alcanzar metas importantes en cuanto a los estudios, el trabajo, mejora de capacidades intelectuales o habilidades manuales.
  2. La Inseguridad física. Bien sea en cuanto al aspecto físico o también podría deberse a una falta de rendimiento o capacidad. La más habitual es la inseguridad porque la persona considera que su aspecto físico no es el que le gustaría, muchas veces por no coincidir con los cánones de belleza establecidos. También se puede dar en el terreno sexual por miedo a no rendir o no ser suficiente.
  3. Inseguridad en las relaciones sociales
  4. La inseguridad al enfrentarse a situaciones nuevas. El miedo a no cumplir las expectativas propias o de los demás suele ser la clave en estos casos.
  5. Inseguridad emocional en la pareja. Principalmente en estos casos aparecen los celos en la pareja. Los celos son motivo de muchas consultas y suelen ser indicativo de una gran inseguridad. Por supuesto en los celos también median otros aspectos importantes como, por ejemplo, la historia de la relación de pareja. 

¿A que se debe la inseguridad?

Como en la mayoría de las cosas que nos pasan a las personas, hay una parte que tiene que ver con la genética de la persona y otra que depende del ambiente, del entorno. Los aprendizajes que va haciendo una persona a lo largo de su vida influyen en su capacidad para desenvolverse en las distintas situaciones. Así mismo, la familia es el primer contexto de desarrollo de cada persona y, desde luego, esos modelos son claves. Los padres juegan un papel importante y sus actitudes pueden favorecer el adecuado enfrentamiento o, por el contrario, la evitación.

Las personas con dependencia, inseguridad y baja autoestima tienden a estar menos satisfechas con su vida en general. Es increíble como la inhibición, cuando es significativa, puede repercutir en peor calidad de vida y mayor sensación de frustración.

¿Son iguales las inseguridades de una mujer y las de un hombre?

Las inseguridades de una mujer y las de un hombre no tienen porqué ser distintas pero, no obstante pueden aparecer diferencias. Por ejemplo pueden variar en consonancia con la importancia que le da la sociedad en general, y el ambiente cercano en particular, a ciertas cuestiones. Así pues, en el aspecto físico hay sociedades más exigentes que otras, sobre todo en lo que a la mujer se refiere. Sin embargo, en cuanto a la capacidad para ganar dinero, tener un buen trabajo, prosperar y mantener económicamente a la familia suele existir mayor presión hacia los hombres.  Por ello, la sociedad puede influir en los aspectos en los que hombres y mujeres sienten que «han de dar la talla» y si no cumplen esas expectativas puede aparecer una mayor inseguridad.

Las inseguridades a distintas edades

Es frecuente la inseguridad en los niños, de hecho, muchos adultos con esta problemática fueron inseguros en su infancia y adolescencia. Con la edad, lo habitual es ir adquiriendo mayor seguridad a la hora de desenvolverse en distintos ambientes sociales y situaciones particulares que generan algo de ansiedad. Cuando el niño o adolescente sufre por ello y se ve perjudicado, entonces es mejor pedir ayuda. De esta manera se podrá resolver más fácilmente, sin tener que esperar a hacerse adulto para ir mejorando. Si la persona no se enfrenta y se limita, la situación, en vez de mejorar con la edad puede empeorar y tener cada vez más problemas en su desarrollo. Por ello la inseguridad en la adolescencia causa más problemas que en la niñez y en la adultez más que en la adolescencia.

La inseguridad ¿como superarla?

 Al trabajar la inseguridad es necesario atender a las necesidades de la persona en particular. Enfocando el tratamiento a las situaciones que le generan mayor problemática y atendiendo a posibles factores clave que estén manteniendo el problema.

La inseguridad y ansiedad van de la mano muchas veces y, en estos casos hemos de afrontar los problemas de ansiedad en primer lugar porque ello hará que sea más fácil trabajar las inseguridades.

Muchas personas se plantean  el porqué de su inseguridad personal y como superarla. Pues si es tu caso, has de saber que como profesional te puedo ayudar a superar los miedos que te paralizan. Y que, por tanto, superarlo es posible con las estrategias adecuadas.